I got married when I was 23 years old. At that time my biggest dreams were to finish my studies, take a trip and expand our family. I always dreamed of having a boy and a girl. 6 months after getting married I started bleeding for a month without stopping. After many medical tests we discovered that I had fibroids in my uterus.
The Doctor at that time told us that it would be difficult to have children, but not impossible. So at that time we focused on our other goals and dreams, but as the years went by and we saw that we were not achieving a pregnancy we began to worry so we decided to get tested. I had my first laparoscopy and in addition to making sure the fibroids were there Doctor also removed a polyp. At that moment the Dr. did not give us hope and told us that neither he nor anyone else could operate on those fibroids and that the ideal would be to remove my uterus to stop the bleeding, anemia and severe pain. His final advice was that if I wanted to have a pregnancy I would have to try with fibroids.
We first started trying medicated cycles which didn’t work, then we did artificial insemination which didn’t work either and then with a broken heart we went to an infertility specialist. After several studies, analysis and tests we knew that I had a low ovarian reserve and a hormonal disorder. Our infertility specialist recommended IVF.
By December 2020, we had completed our first In-Vitro cycle, after the transfer we discovered we lost our only embryo. Nobody prepares you for this. Once I saw that photo of that embryo, it became my hope. Once I saw on the monitor and how they placed it in my belly, I fell in love and left the clinic full of plans and dreams. I never thought I would see a negative pregnancy test, much less that it would be so painful for me and my husband.
Armed with courage, I decided to try again so we prepared for a second IVF cycle. In this cycle we achieved two embryos and were able to transfer them on April 26, 2021. This time the embryos were qualified with a higher rank, and we were sure that this time yes we would achieve a healthy pregnancy. Unfortunately I had bleeding and once again we were facing another loss. Once again, we were destroyed. But we didn’t know what to do with that pain or how to share it because for people losing an embryo or an early pregnancy means nothing.
My husband and I were in a very lonely grieving process. There was our time, savings and hopes. Heartbroken we decided to start one last IVF cycle. In August 2021 we transferred the only embryo we obtained from that last treatment and sadly once again we lost it. My eggs were not only low in quantity but also in quality. So the Dr. recommended not continuing with IVF and told us about egg donation. At that moment I remember saying to him, but Doctor, what do we do about my fibroids and my pain? He told me we are going to operate on those fibroids and then he will decide what you want to do. My previous doctor said no one would ever operate on them, but this doctor sent from heaven operated on them and removed 10 huge fibroids and leaving my uterus completely healthy.
At that time we had heard a story about embryo adoption and I asked our Doctor if it would be something we could do. When he told us yes, we tried it here in Puerto Rico but it didn’t happen. After losing 4 embryos, not achieving adoption in Puerto Rico broke my heart on a level that I did not imagine possible. The losses had already affected my emotions and my heart, I had recurring panic attacks and I felt like I was not a healthy woman, defective and worthless. Science refers to embryos as cells but for me they were much more than that, they were my babies. The support for us was very minimal because people either do not understand these processes or do not give them importance.
Although our hearts could not bear more pain and loss, we took on the task of doing this process outside of our country (embryo adoption). It was very complicated, but not impossible. God did not abandon us in the process. We select our clinic in the United States and began the entire medical phase. The time came to select our embryo and with the help of our Dr. We selected one.
By April I started medication for what would be my fourth transfer, but this time with an adopted embryo. Everything progressed as expected and on June 19, 2022 we left Puerto Rico to have the transfer in the state of Maryland. The 20th was our transfer day. 10 days later we learned that my womb had officially become the home of who is now our princess. After 16 years of struggling with infertility, disappointment, and loss, I was able to have a very healthy, full-term pregnancy. On February 21, 2023, on this side of the earth we were able to embrace our promise from God, our rainbow: Katniss Jesiah.
Me casé a mis 23 años. En aquel momento mis sueños más grandes eran terminar mis estudios, hacer un viaje y agrandar nuestra familia. Siempre soñé con tener un niño y una niña. A 6 meses de haberme casado comencé a sangrar por un mes sin parar. Luego de muchos estudios médicos descubrimos que tenia unos fibromas en el útero.
El Doctor en ese momento nos comentó que sería difícil tener hijos, pero no imposible. En ese momento nos enfocamos en nuestras otras metas y sueños, pero al pasar de los años y ver que no lográbamos un embarazo comenzamos a preocuparnos así que decidimos hacernos pruebas. Tuve mi primera laparoscopia y además de asegurarnos que los fibromas estaban ahí también extrajeron un pólipo. En ese momento el Dr. no nos dio esperanzas y nos dijo que ni el ni nadie me podían operar esos fibromas que lo ideal era remover mi útero para detener los sangrados, la anemia y los fuertes dolores. Su consejo final fue que si quería tener un embarazo tendría que intentarlo con los fibromas. Comenzamos a intentar primero ciclos medicados los cuales no funcionaron seguido hicimos una inseminación artificial que tampoco funcionó y ahí con el corazón destrozado fuimos a un especialista en infertilidad. Luego de varios estudios, análisis y pruebas supimos que tenia una baja reserva ovárica y un trastorno hormonal. Nuestro especialista en infertilidad recomendó IVF. “
Para diciembre del 2020habiamos culminado nuestro primer ciclo de In-Vitro donde luego de la transferencia perdimos nuestro único embrión. Nadie te prepara para esto. Una vez vi esa foto de ese embrión se convirtió en mi esperanza. Una vez vi en el monitor como lo colocaron en mi vientre me enamoré y salí de la clínica llena de planes y sueños. Jamás pensé que vería una prueba negativa de embarazo y mucho menos que seria tan doloroso para mi y para mi esposo. Armada de valor decidí volver a intentarlo así que nos preparamos para un segundo ciclo de IVF en este ciclo logramos dos embriones y pudimos transferirlos el 26 de abril del 2021. En esta ocasión los embriones estaban calificados con un mayor rango y estábamos seguros que esta vez sí lograríamos el embarazo. Lamentablemente tuve un sangrado y una vez más estábamos ante otra pérdida. Una vez más estábamos destruidos. Pero no sabíamos que hacer con ese dolor ni como compartirlo pues para la gente perder un embrión o un embarazo temprano no implica nada. Mi esposo y yo estuvimos en un proceso de duelo muy solitario. Ahí estaba nuestro tiempo, ahorros y esperanzas. Con el corazón roto decidimos comenzar un último ciclo IVF.
En agosto del 2021 transferimos el único embrión que logramos de ese ultimo tratamiento y tristemente una vez mas lo perdimos. Mis óvulos no solo eran bajos en cantidad sino en calidad. Así que el Dr. recomendó no continuar con IVF y nos habló de donación de óvulos. En aquel momento recuerdo que le dije pero Doctor que hacemos con mis fibromas y mis dolores. El me dijo vamos a operarte esos fibromas y después decides lo que quieras hacer. Mi doctor anterior dijo que nadie los operaría jamás pero sepan que este doctor enviado del cielo los operó, sacò 10 fibromas enormes y dejó mi útero completamente sano. En ese momento habíamos escuchado una historia sobre la adopción de embriones y le pregunté a nuestro Doctor si sería algo que podríamos hacer. Cuando nos dijo que si, lo intentamos aquí en Puerto Rico pero no sucedió.
Luego de perder 4 embriones, no lograr la adopción en Puerto Rico rompió mi corazón a un nivel que no lo imaginaba posible. Las perdidas ya habían afectado mis emociones y mi corazon, tenia ataques de pánico recurrentes y me sentía poca mujer, defectuosa e inservible. La ciencia se refiere a los embriones como células pero para mi eran mucho mas que eso. El apoyo para nosotros fue bien mínimo pues las personas o no entienden estos procesos o no le dan importancia. Fue horrible. Aunque nuestros corazones no aguantaban más dolor y pérdidas nos dimos a la tarea de hacer este proceso fuera de nuestro país. Fue muy complicado, pero no imposible. Dios no nos abandonó en el proceso. Seleccionamos nuestra clínica en Estados Unidos y comenzamos toda la fase médica. Llegó el momento de seleccionar nuestro embrión con ayuda de nuestro Dr. seleccionamos y ya para abril comencé la medicación para lo que sería mi cuarta transferencia, pero esta vez con un embrión adoptado.
Todo progresó de la forma esperada y el dia 19 de junio del 2022 salimos de Puerto Rico para tener la transferencia en el estado de Maryland. El dia 20 fue el gran dia de la transferencia. 10 días mas tarde supimos que mi vientre oficialmente se había convertido en el hogar de la que hoy es nuestra princesa. Tras 16 años de lucha con la infertilidad, la decepción y las perdidas pude tener un embarazo a término muy sano y saludable. El dia 21 de febrero de 2023 pudimos abrazar de este lado de la tierra nuestra promesa de Dios, nuestro arcoíris : Katniss.
Photos taken by Rotelle Studio on the Go.
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